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“Este lugar fue una escuela para nuestra generación fundacional encabezada por el Comandante Chávez y sus compañeros que abrieron el camino para el renacer de la patria con aquella rebelión antiapellidos, antioligárquica, antiimperialista, profundamente revolucionaria, Bolivariana, Zamorana, Robinsoniana, fue de las raíces profundas de nuestra historia que nació nuestra ideología de Revolución, eso no lo pueden entender los imperialistas ni los europeos”, resaltó el presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro a propósito de la celebración del aniversario número 30 de la salida del Comandante Hugo Chávez de la Cárcel de la Dignidad.
El jefe de Estado sostuvo que la visión colonialista de Europa sobre América Latina sigue viva y, como ejemplo de ello, mencionó a Josep Borrell, cuya visión es racista y guerrerista, pese a que supuestamente viene de la izquierda. “Toda esa gente tiene una visión despreciativa, nos ven por encima del hombro, por eso los echamos a plomo de aquí, los echamos fue a plomo”.
En tal sentido, destacó que, dos siglos después de haber acabado con el imperio español, Bolívar renació en el espíritu de la rebelión antiimperialista y anticolonialista del 4 de febrero de 1992.
“Esa fue su oferta principal, él no ofreció 100 mil casitas al año, más nada. Él dijo: voy a liberar a Chávez y a los patriotas y el pueblo que quería la libertad de sus líderes les dio la victoria, por estrecho margen, pero les dio la victoria y ya en diciembre se escuchaban los vientos de cambio”.
Por su parte, el gobernador del estado Zulia y dirigente revolucionario, Francisco Arias Cárdenas recordó que, posterior a su salida de la cárcel de la dignidad, además de la recuperación en el ámbito de la salud, junto al Comandante eterno iniciaron los planes para avanzar en lo político que era el paso siguiente a la rebelión del 4 de febrero de 1992 y estaba enfocado en la participación ciudadana, que se resumía en el camino democrático que habían escogido de manera consensuada quienes participaron en este evento que marcó un antes y un después en la historia del país.
“Aquí pasamos muchos sin sabores, cuando se metían a la fuerza y nos sacaban los libros, cuando nos llevaban todas las cosas y nos dejaban prácticamente con las sábanas solamente, y también vivimos el encuentro, la conversación, el fortalecernos, la visita de la gente de la calle que venía a decirnos, esto no termina aquí, esto apenas está comenzando”, concluyó.
